Tanto planificarlo y aquí estamos….
Prontas a despedirnos de esta rapidez,
de este ruido que me molesta tanto,
con mi piojo emprenderemos la partida,
nos cambiamos a otra comuna, ya esta
decidido, oleado y sacramentado, jajaja,
estamos felices, aunque a ratos me vengan
incertidumbres que me toman por sorpresa…
La tranquilidad es algo por lo cuál aposté siempre, y es
fundamental en mi vida, el campo, la naturaleza, te lo dan,
el aroma de su aire se siente ya distinto, quiero despertar
oyendo los pajaritos, sentir mis atardeceres con olor a alfalfa,
y en las noches será la luna mi mejor consuelo, perderme
en el verde natural hará de mis días un sueño…
Este es el rito de despedida, no estaré tan lejos, habrá un
constante regreso, y aún así me sentiré de visita, quiero sentirlo,
quiero ser dueña de mi propio espacio, quiero crear mi mundo a
partir de mis debilidades, quiero arreglármelas a mi manera,
quiero dirigir mi camino…
Eso sí, no lo olviden se reciben visitas…
